El aceite de la transmisión por mucho tiempo ha sido objeto de mantenimiento constante. Hasta hace unos años hablar de cambio de aceite de la transmisión estaba en el vocabulario de los mecánicos. Sin embargo, todo ha cambiado con el tiempo.

El desarrollo de los lubricantes en el tiempo ha llevado a que los estos tengan una mayor durabilidad, gracias a las mejoras en las bases de los lubricantes y la gama de sus aditivos. No obstante, debemos considerar antes de cambiar o no el aceite de la transmisión, el manual del fabricante.

El fabricante es el único que puede establecer un tiempo prudente para el cambio del aceite de la transmisión, ya que, el pensar que el aceite debe cambiarse por sospecha después de acumular varios kilómetros recorridos puede ser tan peligroso, como no hacerlo. Antes de realizar la operación de cambio, le sugiero que verifiquen con el representante de la marca si debe cambiarse y la periodicidad con la cual se debe realizar; todas marcas contemplan estos tiempos en sus planes de mantenimiento.

Ahora bien, muchos pensaran realizar el cambio del aceite de la transmisión por fuera de la red de la marca por que como diríamos aquí en Colombia coloquialmente “El palo no está para cuchara”, es importante revisar después del cambio de aceite que la transmisión, que esta no presente ninguna fuga.

Para finalizar, debemos estar muy atento a los síntomas que presenta el vehículo para evitar daños en la transmisión. Si percibimos alguno de estos síntomas es necesario llevar el vehículo al taller concesionario o a su mecánico de confianza.

Para las transmisiones mecánicas o manuales, los síntomas son los siguientes:

1. Cuesta cambiar de marcha en frío, esto ocurre porque el aceite ha perdido viscosidad, pero compensa cuando se calienta.
2. Cuesta cambiar de marcha continuamente, en esta situación el aceite ha perdido viscosidad.
3. El traqueo al cambiar de marcha ocurre porque el aceite de la transmisión está demasiado fluido o nivel mínimo.
4. Cuando las marchas se saltan, es porque hay falta de aceite dentro de la caja de cambios debido a una fuga.
5. El zumbido de caja, que se escucha muy similar al de un rodamiento, puede que se presente cuando acelera y en algún cambio en específico.

Y en cuanto a las transmisiones automática, los síntomas a prestar atención son:

1. En frío, el tiempo de reacción al arrancar (de punto muerto a primera) es más largo: el aceite ha perdido viscosidad, pero compensa cuando se calienta.
2. El arranque necesita más potencia: falta aceite debido a una fuga.
3. El cambio de marcha es muy lento, incluso imposible: hay poco o nada de aceite debido a una fuga.

Recuerda que las transmisiones son tan importantes como tu motor, por eso tienes que cuidarlas e incluirlas en tus planes de mantenimiento. Conoce nuestro portafolio de productos, da click aquí y contáctanos.